 | Entonces, por la bendición de Jamadagni, la madre y los hermanos del Señor Paraśurāma volvieron inmediatamente a la vida y se sintieron muy felices, como si despertasen de un profundo sueño. Obedeciendo a su padre, el Señor Paraśurāma había matado a sus familiares, pues era perfectamente consciente de su poder, austeridad y sabiduría.
|