Śrīmad-Bhāgavatam
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sarvato manaso ’saṅgam
ādau saṅgaṁ ca sādhuṣu
dayāṁ maitrīṁ praśrayaṁ ca
bhūteṣv addhā yathocitam

PALABRA POR PALABRA



TRADUCCION

Un discípulo sincero debe aprender a disociar la mente de todo lo material y cultivar positivamente la asociación con su maestro espiritual y otros santos devotos. Debe ser misericordioso con aquellos que están en una posición inferior a la suya, cultivar la amistad con aquellos que están en un nivel igual y servir dócilmente a aquellos que están en una posición espiritual superior. De este modo, debe aprender a tratar apropiadamente a todos los seres vivos.

SIGNIFICADO

Śrīla Madhvācārya cita el Garuḍa Purāṇa para demostrar que, en este universo, aquellos que nacen como semidioses, grandes ṛṣis, seres humanos piadosos son considerados santaḥ, personas santas. Según el Bhagavad-gītā, traiguṇya-viṣayā vedāḥ: la cultura varṇāśrama descrita en la literatura védica trata principalmente de las entidades vivientes que luchan dentro de las tres modalidades de la naturaleza. La literatura védicas enseña a estas almas condicionadas que la felicidad material solo se puede lograr mediante obras piadosas. En ese sentido, los semidioses deben ser considerados las entidades vivientes más piadosas dentro de las tres modalidades de la naturaleza material. Los ṛṣis, los grandes místicos santos del universo, que pueden viajar a voluntad a diversos planetas y que cultivan poderes místicos, deben considerarse algo inferiores a los semidioses. Aquellos seres humanos de la Tierra que ejecutan perfectamente los rituales védicos deben considerarse en la tercera categoría, la más baja, de los santaḥ, personas santas. Pero un devoto del Señor está más allá de las tres modalidades de la naturaleza material. El Señor Kṛṣṇa dice en el Bhagavad-gītā (14.26):

māṁ ca yo ’vyabhicāreṇa
bhakti-yogena sevate
sa guṇān samatītyaitān
brahma-bhūyāya kalpate


«Aquel que se dedica plenamente al servicio devocional, que no cae bajo ninguna circunstancia, de inmediato trasciende las modalidades de la naturaleza material y llega así al nivel de Brahman».



Así pues, el Señor Kṛṣṇa dice claramente que un vaiṣṇava que no se aparta de las regulaciones del bhakti-yoga está más allá de las tres modalidades de la naturaleza. El Señor Kṛṣṇa le aconsejó a Arjuna, un kṛṣṇa-bhakta, que trascindiera las tres cualidades materiales de la creación ilusoria de māyā (nistraiguṇyo bhavārjuna). Pero en el Decimoctavo Capítulo del Bhagavad-gītā (18.40), el Señor dice:

na tad asti pṛthivyāṁ vā
divi deveṣu vā punaḥ
sattvaṁ prakṛti-jair muktaṁ
yad ebhiḥ syāt tribhir guṇaiḥ


«No existe ningún ser, ni aquí ni entre los semidioses de los sistemas planetarios superiores, que esté libre de las tres modalidades de la naturaleza material».



Así pues, los semidioses no están exentos de la contaminación de las tres modalidades de la naturaleza material, mientras que en realidad un devoto puro se vuelve guṇātīta, trascendental a la influencia de māyā.

Por lo tanto, uno debe cultivar la asociación del uttama-adhikārī, el devoto puro del Señor, como se afirmó anteriormente (Śrīmad-Bhāgavatam 11.3.21):

tasmād guruṁ prapadyeta
jijñāsuḥ śreya uttamam
śābde pare ca niṣṇātaṁ
brahmaṇy upaśamāśrayam


«Por lo tanto, toda persona que desee seriamente la verdadera felicidad debe buscar un maestro espiritual genuino y refugiarse en él mediante la iniciación. La cualificación del guru genuino es que ha comprendido las conclusiones de las Escrituras mediante la deliberación y es capaz de convencer a los demás de esas conclusiones. Estas grandes personalidades, que se refugiaron en el Dios Supremo, dejando de lado todas las consideraciones materiales, deben ser consideradas maestros espirituales genuinos».



Por otra parte, uno debe evitar la asociación con una persona materialista incluso si esa persona está cantando externamente los santos nombres de Kṛṣṇa. Śrīla Rūpa Gosvāmī aconseja a este respecto:

kṛṣṇeti yasya giri taṁ manasādriyeta
dīkṣāsti cet praṇatibhiś ca bhajantam īśam
śuśrūṣayā bhajana-vijñam ananyam anya-
nindādi-śūnya-hṛdam īpsita-saṅga-labdhyā


Se puede ofrecer respeto mentalmente a cualquier entidad viviente que esté cantando el santo nombre de Kṛṣṇa, pero se debe evitar la relación íntima con personas materialistas, especialmente con aquellas apegadas al disfrute sexual. Tamo-dvāraṁ yoṣitāṁ saṅgi-saṅgam. Si uno se relaciona con una persona sensual que está apegada a la compañía de mujeres, esa relación lo llevará al infierno con toda seguridad.

Pero si una persona materialista se acerca a un devoto puro con el deseo sincero de escuchar de él acerca de la mejora espiritual, ese devoto de primera clase puede misericordiosamente ofrecerle su compañía, siempre que el propósito de ese encuentro sea el avance en el servicio devocional a Kṛṣṇa. Mediante esa compañía, incluso una persona materialista puede volverse gradualmente un devoto puro de Kṛṣṇa. Si un devoto avanzado no es capaz de ocupar a una persona materialista en el servicio devocional de Kṛṣṇa, esa compañía está estrictamente prohibida.

En el Garuḍa Purāṇa se afirma:

viśeṣataḥ svottameṣu
vinā saṅgaṁ na mucyate
sva-nīceṣu tu deveṣu
vinā saṅgaṁ na pūryate


«No es posible liberarse sin la compañía de un devoto puro del Señor. A menos que se muestre misericordia hacia quienes se encuentran en una posición inferior, la vida será superficial».



En el Movimiento para la Conciencia de Kṛṣṇa tenemos la experiencia práctica de que quienes expanden su misericordia mediante la prédica del mensaje de Kṛṣṇa están haciendo un rápido progreso espiritual y su vida está llena de bienaventuranza trascendental. Quienes descuidan la cualidad de la misericordia, al no estar interesados ​​en las actividades misioneras del movimiento para la Conciencia de Kṛṣṇa, no están llenos de placer trascendental, tal como se describe aquí con la palabra pūryate. Al no estar llenos de placer espiritual, esas personas sin duda intentarán llenar su vida de placer material mediante la complacencia de los sentidos y la especulación mental, relacionándose con mujeres o leyendo innumerables novelas, periódicos, revistas de noticias, etc. mundanos. Según Śrī Caitanya Mahāprabhu, las actividades de prédica del Movimiento para la Conciencia de Kṛṣṇa son ānandāmbudhi-vardhanam, el océano de bienaventuranza en constante aumento. Las actividades misioneras se basan en el principio de dayām, la misericordia hacia aquellos que han caído. Quienes realmente están predicando se animan al relacionarse con otros predicadores. Este principio se denomina maitrīm, amistad entre iguales. El poder para llevar a cabo esas actividades de prédica, así como la guía adecuada para distribuir el mensaje de Kṛṣṇa, se obtiene mediante el principio de praśrayam, el servicio humilde a los pies de loto de autoridades espirituales tales como el maestro espiritual. Si uno predica el proceso de Conciencia de Kṛṣṇa con sinceridad bajo la guía de un maestro espiritual genuino y en compañía de otros predicadores, está cumpliendo perfectamente la declaración de este verso del Śrīmad-Bhāgavatam, de ese modo llegará al punto de sarvato manaso 'saṅgam, el desapego completo de la energía ilusoria del Señor. Caitanya Mahāprabhu afirmó: lava-mātra sādhu-saṅge sarva-siddhi haya. Quien se apegue a los devotos del Señor alcanzará la perfección total en la vida, yendo de regreso al hogar, de vuelta a Dios.

Si uno descuida la orden de la Suprema Personalidad de Dios al dedicarse a una vida pecaminosa, ciertamente no es misericordioso. Aquel que ignora su condición eterna como parte integral del Señor Supremo y que, en cambio, se cubre cada vez más con ilusiones materiales en forma de designaciones temporales —«soy norteamericano», «soy ruso», «soy indio», «soy negro», «soy blanco», etc.— ciertamente es un asesino de su propia alma y no puede ser considerado misericordioso. De manera similar, aquellos que apoyan la matanza de animales comiendo carne, pescado y huevos no pueden ser considerados misericordiosos. A veces se argumenta que si uno no daña a los demás es perfectamente religioso. Pero como ahora estamos en un estado de ignorancia, no tenemos la menor idea de las reacciones futuras a nuestras actividades actuales. Alardear ignorantemente de que uno no está dañando a los demás, sin tener conciencia de las leyes sutiles de la naturaleza, no hace que uno sea una persona religiosa. Uno se vuelve religioso al entregarse a las leyes de Dios tal como las enuncia el propio Señor en el Bhagavad-gītā. Mientras la entidad viviente esté fascinada con sus propias especulaciones mentales, que la arrastran como las olas del océano, no podrá entender el proceso del servicio devocional a la Suprema Personalidad de Dios. Las especulaciones mentales basadas en nuestra experiencia de las variadas creaciones de la energía ilusoria del Señor son incapaces de llevarnos al conocimiento perfecto. Uno debe abandonar la asociación materialista y buscar la compañía de los devotos puros del Señor, aquellos que están dedicados las veinticuatro horas del día a complacer perfectamente al Señor Supremo.

Uno debe cultivar la asociación con aquellos que son más avanzados que uno en el servicio devocional. El avance de uno puede medirse por el desapego de la complacencia de los sentidos y por su capacidad de distribuir la Conciencia de Kṛṣṇa entre los demás. En relación con esto, Śrīla Narottama dāsa Ṭhākura dijo: chāḍiyā vaiṣṇava-sevā, nistāra pāyeche kebā: «¿Quién puede alcanzar la salvación si abandona el servicio de los vaiṣṇavas?» Al servir los pies de loto de los devotos puros, uno se ilumina inmediatamente con el conocimiento espiritual. Todos los supuestos placeres del mundo material, que culminan en muchas variedades de fantasías sexuales y visiones impersonales de uno mismo como Dios, se vuelven inútiles para aquel que alcanzó la misericordia de los pies de loto de un devoto puro de Kṛṣṇa. Toda la creación material se compara a una insignificante burbuja en el océano. El universo material reposa sobre la potencia espiritual del Señor, llamada brahmajyoti, tal como una insignificante burbuja reposa sobre la potencia del océano ilimitado. Al servir los pies de loto de un devoto puro, uno puede entrar en el océano de la felicidad eterna y experimentar su posición constitucional como sirviente de Kṛṣṇa. La misericordia de los vaiṣṇavas es ilimitada, aquel que prueba esta misericordia se vuelve loco por los pies de loto de Kṛṣṇa, sin importarle las alucinaciones del supuesto placer material o la especulación mental. La misericordia de los vaiṣṇavas es substancial y tan poderosa como el propio Kṛṣṇa, mientras que las especulaciones impersonales y los sueños desesperanzados de sociedad, amistad y amor constituyen simplemente diversos medios por los cuales māyā engaña a las almas condicionadas y las mantiene en perpetua frustración.

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