Śrīmad-Bhāgavatam
<< Canto 11, Historia general >>
<< 19 - La perfección del conocimiento espiritual >>
<<VERSO 15 >>

etad eva hi vijñānaṁ
na tathaikena yena yat
sthity-utpatty-apyayān paśyed
bhāvānāṁ tri-guṇātmanām

PALABRA POR PALABRA



TRADUCCION

Cuando ya no vemos los veintiocho elementos materiales separados que surgen de una sola causa, sino que vemos la causa misma, la Personalidad de Dios, en ese momento nuestra experiencia directa se denomina vijñāna, autorrealización.

SIGNIFICADO

La diferencia entre jñāna (el conocimiento védico corriente) y vijñāna (la autorrealización) puede entenderse de la siguiente manera: aunque un alma condicionada cultive el conocimiento védico, hasta cierto punto continúa identificándose con el cuerpo y la mente materiales, en consecuencia con el universo material. Al tratar de comprender el mundo en el que vive, mediante el conocimiento védico el alma condicionada aprende que la Suprema Personalidad de Dios es la única causa suprema de todas las manifestaciones materiales. Llega a comprender el mundo que la rodea, al que acepta más o menos como su mundo. A medida que progresa en la iluminación espiritual, rompiendo la barrera de la identificación corporal, comprende la existencia del alma eterna, gradualmente se identifica como parte integral del mundo espiritual, Vaikuṇṭha. En ese momento ya no está interesada en la Personalidad de Dios meramente como la explicación suprema del mundo material; más bien, comienza a reorientar todo su modo de conciencia de modo que el objeto central de su atención sea la Personalidad de Dios. Esa reorientación es necesaria, ya que el Señor Supremo es el verdadero centro y causa de todo. Un alma autorrealizada en la etapa de vijñāna experimenta así a la Personalidad de Dios, no meramente como el creador del mundo material, sino como la entidad viviente suprema que existe bienaventuradamente en Su propio contexto eterno. A medida que uno progresa en la comprensión del Señor Supremo en Su propia morada en el cielo espiritual, gradualmente se desinteresa del universo material y deja de definir al Señor Supremo en términos de Sus manifestaciones temporales. Un alma autorrealizada en la etapa de vijñāna no se siente atraída en absoluto por los objetos que se crean, se mantienen y finalmente se destruyen. La etapa de jñāna es la etapa preliminar del conocimiento para aquellos que todavía se identifican a sí mismos en términos del universo material, mientras que vijñāna es la etapa madura del conocimiento para aquellos que se ven a sí mismos como parte integral del Señor Supremo.

Dona al Bhaktivedanta Library