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Śrīmad-Bhāgavatam << Canto 11, Historia general >> << 10 - La naturaleza de la actividad fruitiva >> <<VERSO 5 >>
yamān abhīkṣṇaṁ seveta niyamān mat-paraḥ kvacit mad-abhijñaṁ guruṁ śāntam upāsīta mad-ātmakam
PALABRA POR PALABRA
TRADUCCION
 | Quien Me acepta como la meta suprema de la vida debe observar estrictamente los mandamientos de las Escrituras que prohíben las actividades pecaminosas y, en la medida de lo posible, debe cumplir los mandamientos que prescriben los deberes regulativos menores, como la limpieza. Sin embargo, en última instancia, debe acudir a un maestro espiritual genuino que tenga pleno conocimiento de Mí tal como soy, que sea pacífico y que, por su elevación espiritual, no sea diferente de Mí.
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SIGNIFICADO
 | La palabra yamān se refiere a los principales mandamientos regulativos necesarios para preservar la pureza. En el Movimiento para la Conciencia de Kṛṣṇa, todos los miembros genuinos deben dejar de comer carne, pescado y huevos, también deben evitar la intoxicación, los juegos de azar y el sexo ilícito. La palabra abhīkṣṇam indica que no se pueden realizar en ningún momento esas actividades prohibidas, ni siquiera en circunstancias difíciles. La palabra niyamān se refiere a mandamientos menos obligatorios, como bañarse tres veces al día. En ciertas situaciones difíciles, uno puede no bañarse tres veces al día y aun así mantener su posición espiritual. Pero si uno se dedica a actividades pecaminosas y prohibidas, incluso en circunstancias difíciles, indudablemente habrá una caída espiritual. En última instancia, como se explica en el Upadeśāmṛta, la mera adherencia a reglas y regulaciones no puede darnos la perfección espiritual. Uno debe acudir a un maestro espiritual genuino que sea mad-abhijñam, que tenga pleno conocimiento de la forma personal de Dios. La palabra mat («yo») niega la posibilidad de que un maestro espiritual genuino tenga una concepción impersonal de la Verdad Absoluta. Además, el guru debe tener un control absoluto de sus sentidos; por lo tanto, se le llama śānta, pacífico. Debido a que está completamente entregado a la misión del Señor, ese maestro espiritual es mad-ātmakam, no diferente de la Personalidad de Dios.
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