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Śrīmad-Bhāgavatam << Canto 11, Historia general >> << 1 - La maldición a la dinastía Yadu >> <<VERSO 3 >>
bhū-bhāra-rāja-pṛtanā yadubhir nirasya guptaiḥ sva-bāhubhir acintayad aprameyaḥ manye ’vaner nanu gato ’py agataṁ hi bhāraṁ yad yādavaṁ kulam aho aviṣahyam āste
PALABRA POR PALABRA
TRADUCCION
 | La Suprema Personalidad de Dios utilizó la dinastía Yadu, que estaba protegida por Sus propias armas, para eliminar a los reyes que con sus ejércitos fueron la carga de esta Tierra. Entonces el insondable Señor pensó para Sí mismo: «Aunque algunos digan que la carga de la Tierra ya no existe, en Mi opinión aún no ha desaparecido, porque aún queda la propia dinastía Yādava, cuya fuerza es insoportable para la Tierra».
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SIGNIFICADO
 | Śrīla Bhaktisiddhānta Sarasvatī Ṭhākura a este respecto señala que, aunque la gente común pudiera pensar que el Señor ya había eliminado la carga de la Tierra al matar a los demonios, restablecer el dharma, etc., el propio Señor Śrī Kṛṣṇa podía detectar que existía un peligro adicional debido a las actividades irreligiosas de los miembros de Su propia familia que estaban actuando de manera indebida. En el Śrīmad-Bhāgavatam se afirma que un rey justo se negará a castigar a su propio enemigo si este es inocente, pero castigará a su propio hijo si este realmente merece el castigo. Así pues, aunque a los ojos del mundo los miembros de la propia dinastía del Señor siempre son adorables, el Señor Kṛṣṇa detectó que, debido a su íntima relación con Él, algunos miembros de la dinastía Yadu se habían vuelto indiferentes a Su voluntad. Como esos caprichosos miembros de la dinastía Yadu podían actuar libremente, pues eran parientes de la Suprema Personalidad de Dios, con toda seguridad causarían grandes desgracias al mundo y las personas necias tomarían esa conducta caprichosa como la voluntad de Kṛṣṇa. Así pues, el Señor, cuyos deseos son inconcebibles, comenzó a considerar la necesidad de aniquilar a los indiferentes y desdeñosos miembros de la familia Yadu.
|  | Desde el punto de vista de las personas comunes, todos los demonios ya habían sido matados por los pasatiempos del Señor Supremo en Dvārakā y Mathurā, así como por la Batalla de Kurukṣetra y ahora la Tierra estaba libre de su carga. Sin embargo, para liberar a la Tierra de la carga restante de Sus propios familiares engreídos, el Señor Śrī Kṛṣṇa los trasladó lejos de la Tierra provocando una pelea fratricida entre ellos. De esa manera, Él preparó Su propia desaparición de la Tierra.
|  | Śrīdhara Svāmī señaló que la palabra bāhubhiḥ, «por Sus brazos», se utiliza en plural (en lugar de en dual) para indicar que el Señor causó la destrucción de la dinastía Yadu en Su forma de cuatro brazos. La forma original de Kṛṣṇa como Govinda es de dos brazos, pero fue mediante la porción plenaria del Nārāyaṇa de cuatro brazos como el Señor mató a todos los demonios de la Tierra y finalmente eliminó a los miembros de Su propia familia que eran una carga. Podría preguntarse: si ciertos miembros de la familia Yadu se volvieron indiferentes a la voluntad del Señor, ¿por qué no se opusieron al Señor en Su plan de eliminarlos de la Tierra? Por lo tanto, se utiliza la palabra aprameyaḥ, que indica que es imposible para cualquier persona, incluso para los propios miembros de la familia del Señor, entender por completo Su voluntad.
|  | Śrīla Jīva Gosvāmī da otra razón para la destrucción de la dinastía Yadu. Él recalca que las actividades de la Suprema Personalidad de Dios nunca deben considerarse actividades materiales comunes. Tampoco los asociados del Señor son personas comunes. Aunque el Señor Kṛṣṇa aparentemente se encarna en este mundo por algún tiempo y luego se va, debe entenderse que el Señor Supremo está situado eternamente con Su séquito en Sus diversas moradas en el cielo espiritual, tales como Śrī Gokula, Mathurā y Dvārakā. Los miembros de la dinastía Yadu son asociados eternos del Señor, por lo tanto, no pueden soportar estar separados de Él. Puesto que Kṛṣṇa se disponía a abandonar Sus pasatiempos terrenales, si dejaba a la dinastía Yadu en la Tierra, con toda seguridad ellos se perturbarían tanto por Su ausencia, que en su estado mental sumamente agitado pisotearían y destruirían la Tierra. Por lo tanto, Kṛṣṇa dispuso la desaparición de la dinastía Yadu antes de Su propia desaparición.
|  | Śrīla Jīva Gosvāmī concluye que, en última instancia, los miembros de la dinastía Yadu nunca deben ser considerados irreligiosos. Los ācāryas vaiṣṇavas mencionan que la historia de la desaparición de la dinastía Yadu tiene como propósito especial ayudar a las almas condicionadas a lograr la liberación del cautiverio de la vida materialista. En los tres mundos no había nadie tan poderoso y opulento como la dinastía Yadu. La Suprema Personalidad de Dios es el poseedor de opulencias ilimitadas —belleza, fuerza, conocimiento, fama, etc.— y los miembros de la dinastía Yadu, al ser asociados personales del Señor, también estaban dotados de opulencias inconcebibles. Por lo tanto, cuando vemos cómo una guerra fratricida súbitamente privó a los miembros de la dinastía Yadu de todas sus posesiones terrenales e incluso de sus vidas, podemos entender que no hay una posición permanente dentro de este mundo material. En otras palabras, aunque los miembros de la dinastía Yadu son asociados eternos del Señor y fueron trasladados inmediatamente a otro planeta donde el Señor estaba apareciendo, su desaparición repentina a causa de una guerra fratricida tiene por objeto inculcar en las almas condicionadas la naturaleza temporal de este mundo. Por lo tanto, la aparente indiferencia o enemistad de ciertos miembros de la dinastía Yadu hacia Kṛṣṇa no debe tomarse como una verdadera irreligión de su parte. El Señor Kṛṣṇa dispuso toda la situación para darle una lección a las almas condicionadas. En relación con esto, Śrīla Jīva Gosvāmī cita varios versos del Bhāgavatam para demostrar que los miembros de la dinastía Yadu lograron su excelso nacimiento en la propia familia del Señor mediante innumerables actividades piadosas y por estar completamente absortos en pensar en el Señor Kṛṣṇa. De hecho, se dice que mientras dormían, se sentaban, caminaban y hablaban, eran incapaces de recordarse a sí mismos, porque simplemente estaban pensando en Kṛṣṇa.
|  | En el Primer Canto del Śrīmad-Bhāgavatam (1.15.33), Śrīla Prabhupāda comentó lo siguiente sobre la desaparición de la dinastía Yadu: «La puesta del sol no significa el fin del Sol, sino que el Sol desaparece de nuestra vista. De manera similar, el fin de la misión del Señor en un planeta o universo en particular sólo significa que Él desaparece de nuestra vista. El fin de la dinastía Yadu tampoco significa que esta sea aniquilada, sino que desaparece de nuestra vista junto con el Señor».
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