 | Śrīla Viśvanātha Cakravartī describe esta escena de la siguiente manera: «Las miradas tímidas y amorosas de las mujeres del palacio, insinuando su agitación, implicaban: ‘¿Cómo podemos tolerar este tormento de estar separadas de Ti?’ La idea aquí es que, debido a que el Señor fue capturado por su afecto, sonrió, indicando: ‘Mis queridas e inquietas damas, están tan abrumadas por esta pequeña separación. Regresaré hoy más tarde para disfrutar con ustedes’. Entonces, con Su sonrisa cautivando sus mentes, con dificultad se fue, liberándose de la esclavitud de sus miradas amorosas».
|