Mahābhārata La historia de la Gran India
<< 11 Se cumple la maldición del brahmana >>

Cuando los hijos de Pandu llegaron a este mundo los ascetas habitantes de los Cien Picos inmediatamente los aceptaron dentro de su comunidad y los trataron como si fueran sus propios hijos, mientras tanto los miembros de la dinastía Vrsni, encabezada por Vasudeva, habló entre ellos como sigue: "temeroso a la maldición del brahmana, Pandu paseaba por los Cien Picos y ahi se volvió un asceta morando con los sabios. Subsistía a base de verduras, raíces y frutas silvestres; ejecutando austeridades, controlando sus sentidos cuidadosamente y consagrandose completamente a la meditación mística pensando en la forma del Señor dentro de su corazón, de esta manera vivía el rey" [el líder Vrsni, Vasudeva, era el hermano de Kunti y cuñado de Pandu].

Muchos guerreros Vrsni con sus amigos y aliados tenían un gran amor por Pandu, tanto que cuando escucharon y hablaron de las noticias de su condición, sus corazones se desgarraron por la pena. "¿Cuando escucharemos buenas noticias acerca de Pandu?", asi ellos se lamentaban.

Aunque los Vrsnis y su amigos estaban así afligidos escucharon que a pesar de la maldición del brahmana Pandu se convirtió en el padre de hijos dignos, todos ellos estaban llenos de alegría celebrando entre ellos, le hablaron a Vasudeva las siguientes palabras: "Los poderosos hijos de Pandu no deben ser privados de sus apropiadas ceremonias religiosas, ¡oh Vasudeva!, siempre les tienes cariño y velas por su bienestar, envíales al sacerdote de la familia real".

"¡Que así sea!" dijo Vasudeva y envío al sacerdote de la familia real con muchos regalos adecuados para los niños, recordando a Kunti y a Madri también les envío vacas, oro y plata, envío mozos, criadas y regalos para el hogar; cuando todos estos regalos estuvieron listos, el sacerdote los tomó y partió.

Cuando el rey Pandu que había conquistado las ciudades de sus enemigos vió a Kasyapa, el sacerdote de la familia real, el mejor de los brahmanas, que había llegado al bosque, Pandu lo recibió con gran honor observando la etiqueta estrictamente, Kunti y Madri estaban alegres y elogiaron a Vasudeva. Luego Pandu ocupó al sacerdote en llevar a cabo todos las ceremonias religiosas para el nacimiento de sus hijos y Kasyapa hizo todo lo necesario y benéfico, cortó el cabello a los ilustres príncipes, cuyas miradas eran tan intrépidas como las de un toro, los inició como estudiantes serios de la ciencia védica y ellos se destacaron en sus estudios.

Vaisampayana continúo:
Pandu se regocijó al observar a sus cinco hermosos hijos crecer en los grandes bosques del Himalaya y los protegió con sus poderosas manos, una vez en plena primavera y cuando el bosque estaba resplandeciente con flores coloridas nuevas, el rey Pandu comenzó a pasear por el bosque con su fiel esposa Madri, tan precioso y sensual estaba el bosque que podía encantar la mente de cualquier criatura.

El hermoso bosque estaba lleno de frutas y flores florecientes de color coral y palmeras, mangos y campaka celestiales. El paisaje colorido brillaba con manantiales refrescantes, ríos y lagos llenos de flores de loto y mientras Pandu contemplaba el bosque, el entrometido Cupido surgió en su corazón.

Vestida con prendas brillantes, Madri vió a Pandu deportivo como un semidiós, su hermosa cara brillaba con afecto y ella lo seguía. Pandu observó a su joven esposa caminar cerca con un vestido delgado y ahora su deseo creció como un fuego que llamea desde la profundidad de su ser. A solas con Madri en ese valle solitario Pandu vió ese mismo fuego arder en el corazón de Madri y miró detenidamente a sus preciosos ojos y no pudo cotrolar mas su deseo, porque ya se había apoderado de su propia vida.

En ese bosque solitario el monarca sujetó a su esposa a la fuerza, la semidiosa se retorcía y luchaba con todas sus fuerzas para detenerlo pero el deseo ya lo había poseído y Pandu no recordó en lo absoluto la maldición, a la fuerza se fue sobre Madri en un acto de amor. Como si finalizara su vida el gran monarca Kuru arrojó su temor duradero por la maldición y cayó bajo el dominio de Cupido.

[Se dice que Dios es la fuerza del tiempo, que arrebata todas las cosas en este mundo]. El destino revelado a través del tiempo acosó los sentidos de Pandu y confundió su inteligencia perdiendo su razón e incluso su percepción ordinaria, ¡oh hijo Kuru! mientras él se unía con su esposa el más virtuoso rey se conectaba al inexorable funcionamiento del tiempo.

Abrazando fuertemente al rey muerto Madri sollozaba de angustia, una y otra vez sus atormentados llantos atravesaron al cielo del bosque hasta que Kunti corrió con los cinco niños para ver que estaba mal. Mientras se acercaban al yaciente rey Madri le gritó a Kunti: "¡Acércate sola! ¡Los niños deben permanecer en donde están!"

Escuchando estas palabras Kunti mantuvo a los niños atrás y luego prosiguió sola [conociendo intuitivamente lo que había pasado], se quejó para sí misma: "¡Mi vida se ha acabado! ¡Mi vida se ha terminado!", luego Kunti vió a Pandu y a Madri acostados en el suelo y la aflicción se apoderó de cada uno de sus miembros y sollozó de la pena.

Madri sollozando dijo: "¡Siempre lo protegí!, él era una alma autorrealizada con pleno control de sí mismo, ¡oh Pandu! tú sabías que el brahmana del bosque te había maldecido, ¿cómo pudiste quebrantar esa maldición?

[Temblando de aflicción, Kunti giró hacia Madri] de entre todas las personas Madri, se suponía que tú protegerías al rey, ¿cómo pudiste desearlo en este bosque solitario?, el pobre rey siempre estaba preocupado por la maldición, ¿cómo pudo estar tan agitado por el deseo que vino contigo a un lugar solitario? ¡oh Madri!, tú eres afortunada, eres mucho más favorecida que yo, tú viste el rostro de Pandu en su arrebato de deseo".

Madri dijo:
El rey estaba cautivado por mí, traté una y otra vez de detenerlo pero se rehusó a retroceder como si él mismo tratara que las palabras del brahmana se volvieran realidad.

Kunti dijo:
Soy la mayor de sus esposas religiosas y si nuestros años de servicio fiel han de dar fruto, entonces la primer recompensa es para la mayor. Madri, no me niegues aquello que tiene que suceder, voy a seguir a nuestro señor que ahora pasó a mejor vida, ¡ahora levántate!, déjalo [porque yo moriré en la pira funeraria de Pandu], ¡encárgate de estos niños!

Madri dijo:
Debo seguir a mi esposo porque él no regresará, mis deseos por él no fueron satisfechos, como mi superior ¡por favor déjame hacerlo!, el gran rey Bharata se me acercó con deseo en el momento de su muerte, ¿cómo podría frustrar su amor incluso en el vestíbulo de Yamaraja?, y dónde permaneceré en este mundo, Kunti, no podría tratar a tus hijos como a los míos, me comportaría con mi carácter verdadero y así noble dama, la maldad realmente me atraparía, por lo tanto Kunti tú debes encargarte de mis hijos como si fueran tuyos, porque tú realmente lo puedes hacer. Después de todo cuando el rey estaba por morir me deseó, mi cuerpo será quemado junto con el del rey en la pira funeraria, los cuerpos deben estar completamente cubiertos, ¡oh noble mujer hazme este favor!, ¡se cuidadosa y haz lo que sea mejor para los niños! No tengo mas que decir.

Vaisampayana dijo:
Pandu fue el mejor de los hombres y la hija del rey de Madra lo amó con voto sagrado, ahora esta famosa mujer se subió apresuradamente a su pira funeraria.

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