El Bhagavad-gītā Tal y como es
<< 15 - El yoga de la Persona Suprema>>
<< VERSO 1 >>

शरीभगवान उवाच
ऊर्ध्वमूलम अधःशाखम अश्वत्थं पराहुर अव्ययम
छन्दांसि यस्य पर्णानि यस तं वेद स वेदवित


śrī-bhagavān uvāca
ūrdhva-mūlam adhaḥ-śākham
aśvatthaṁ prāhur avyayam
chandāṁsi yasya parṇāni
yas taṁ veda sa veda-vit

PALABRA POR PALABRA

śrī-bhagavān uvāca — ; ūrdhva-mūlam — ; adhaḥ — ; śākham — ; aśvattham — ; prāhuḥ — ; avyayam — ; chandāṁsi — ; yasya — ; parṇāni — ; yaḥ — ; tam — ; veda — ; saḥ — ; veda-vit — ;

TRADUCCION

La Suprema Personalidad de Dios dijo: Se dice que hay un árbol baniano imperecedero que tiene sus raíces hacia arriba y sus ramas hacia abajo y cuyas hojas son los himnos védicos. Aquel que conoce este árbol es el conocedor de los Vedas.

SIGNIFICADO

Despues de discutir la importancia del bhakti-yoga, uno puede preguntar, «¿qué hay acerca de los Vedas?» En este capítulo se explica que el propósito del estudio de los Vedas es comprender a Kṛṣṇa. Por lo tanto aquel que está en la Conciencia de Kṛṣṇa y que se ocupa de servicio devocional ya conoce los Vedas.

El embrollo de este mundo material es comparado aquí a un árbol baniano. Para aquel que está dedicado a las actividades fruitivas, el árbol baniano no tiene fin. El vaga deuna rama a otra, a otra y a otra. El árbol de este mundo material no tiene fin, para aquel que está apegado a este árbol no hay posibilidad de liberación. A los himnos védicos, destinados para la elevación propia, se les llama las hojas de este árbol. Las raíces de este árbol crecen hacia arriba porque comienzan donde Brahmā está localizado, en el planeta más elevado de este universo. Si uno puede comprender este indestructible árbol de la ilusión, puede entonces salirse de él.

Se debe comprender este proceso de desenredo. En Jos capítulos previos se ha explicado que hay muchos procesos para salirse del enredo material. Hasta el Capítulo Trece, hemos visto que el servicio devocional al Señor Supremo es el mejor camino. Ahora, tenemos que el principio básico del servicio de­vocional es el desapego de las actividades materiales y el apego al servicio trascendental del Señor. Al principio de este capítulo se discute el proceso para romper el apego al mundo material. La raíz de de esta existencia material crece hacia arriba. Esto significa que se origina de la substancia material total, desde el planeta más elevado del universo. De allí se expande todo el universo, con muchas ramas que representan los diferentes sistemas planetarios. Los frutos representan los resultados de las actividades de las entidades vivientes las cuales son la religión, el desarrollo económico, la gratificación de los sentidos y la liberación.

Ahora bien, en este mundo material no hay ninguna experiencia ordinaria de algún árbol situado con sus ramas hacia abajo y sus raíces hacia arriba, pero tal cosa st' existe. Ese árbol puede encontrarse junto a un estanque. Nosotros podemos ver que los árboles de la orilla se reflejan en el agua con sus ramas hacia abajo y sus raíces hacia arriba. En otras palabras, el árbol de este mundo material es solamente un reflejo del verdadero árbol del mundo espiritual. Este reflejo del mundo espiritual está ubicado en el deseo, tal como el reflejo de un árbol está ubicado en el agua. El deseo es la causa de que las cosas se ubiquen en esta luz material reflejada. Aquel que quiera salirse de esta existencia material debe conocer este arbol a fondo a través del estudio analítico, entonces puede cortar su relación con él.

Este árbol, siendo el reflejo del verdadero árbol es una ·réplica exacta. Todo existe en el mundo espiritual. Los impersonalistas aceptan a Brahmā como la raíz de este árbol material y de acuerdo a la filosofía sañkhya, de la raíz aparece la prakṛti, el puruṣa, luego las tres guṇas, después los cinco elementos burdos (pañca-mahā-bhūta), luego los diez sentidos (daśendriya), la mente, etc. Ellos dividen todo el mundo material de esta forma. Si Brahmān es el centro de todas las manifestaciones, entonces este mundo material consti­tuye la manifestación de 180 grados desde el centro, los otros 180 grados los constituye el mundo espiritual. El mundo material es la reflexión perverti­da, así el mundo espiritual debe tener la misma diversidad, pero en la realidad La prakṛti es la energía externa del Señor Supremo y el puruṣa es el Señor Supremo Mismo, eso lo explica el Bhagavad-gītā. Ya que esta manifes­tación es material, también es temporal. Un reflejo es temporal, ya que al­gunas veces se ve y otras no se ve. Pero el origen de donde se manifiesta el reflejo es eterno. Se debe cortar el reflejo material del verdadero árbol. Cuando se dice que una persona conoce los Vedas, se asume que sabe como cortar el apego a este mundo material. Si alguien conoce ese proceso, él efectivamente conoce los Vedas. Aquel que está atraído por las fórmulas ritualistas de los Vedas, está atraído por las bellas hojas verdes del árbol. El no conoce exactamente el propósito de los Vedas. El propósito de los Vedas, tal como lo revela la Suprema Personalidad de Dios Mismo, es derribar este árbol reflejado y obtener el verdadero árbol del cielo espiritual.

Dona al Bhaktivedanta Library